Los constantes estímulos a los que estamos sometidos cada día y el ritmo acelerado de la vida que llevamos, influyen también en los niños y niñas. Aprender a relajarse y a conectar con uno mismo, son actividades que se aprenden con la práctica del Yoga y el Mindfulness y que ayudan a los niños y niñas a encontrar su centro y a no perderse en la vorágine de nuestro día, ¡pero sin dejar de divertirnos!
El formato de las clases tiene una parte de relajación, práctica de Mindfulness y respiraciones, y el trabajo corporal a través de Yoga en el suelo y Yoga en la pared.
Están dirigidas a niños y niñas de entre 4 y 12 años.
Relajación: para frenar la aceleración mental
Mindfulness: práctica para estar plenamente atento a lo que está pasando ahora mismo y nada más
Respiraciones: aprendemos a respirar bien y a ser conscientes de la respiración
Yoga: tomamos consciencia del cuerpo y lo ejercitamos con las posturas des de el suelo
Yoga en la pared: aprendemos a volar, dejando los miedos de no tocar de pies al suelo y nos divertimos haciendo posturas colgados de la pared
Beneficios:
- Mejora la atención y la concentración
- Mejora el bienestar en general
- Potencia un estado emocional positivo, serenidad y una actitud pausada
- Mejora la consciencia corporal y la postura
- Potencia la energía
- Potencia la capacidad de introspección
- Mejora la autoestima
- Potencia la colaboración, el compartir y el respeto
- Potencia la paciencia
- Mejora la percepción espacial